CAPÍTULO 4

NOTHING BUT THE BEAT.

A la mañana siguiente me desperté sin hacer ruido, ya que Bryan y April aún estaban dormidos. Fui al baño y me metí a la ducha. Mientras las gotas deslizaban por mi cuerpo, no paraba de pensar en Adam. Estaba claro que aún le quería, pero tenía que dejar de recordarlo, si no me hacía daño a mí misma. Cuando salí del baño subí a mi cuarto para vestirme. Me vestí un poco formal, ya que íbamos al estudio de EuropaFM y no quería dar mala imagen (Ropa). Cuando acabé de vestirme bajé al salón. April y Bryan ya se habían despertado. Mi madre estaba en la cocina haciendo el desayuno, le dí los buenos días y me senté a desayunar.

-Bryan date prisa, tenemos que ir al estudio.-grité mientras éste subía las escaleras.

-¡Ostia, es verdad! Voy voy.-contestó tropezándose con un escalón mientras April y yo reíamos a carcajadas y él nos miraba con cara de asesino.

-April, ¿quieres venirte con nosotros?-dije mientras daba un mordisco a mi tostada.

-No, tengo que hacer las maletas hoy y arreglar unos asuntos.-contestó ella.

-Bueno, vale. ¿Quieres salir esta noche?-pregunté.

-¡Claro! ¿dónde vamos?-exclamó entusiasmada.

-Donde tú quieras.-respondí yo mientras bebía las pocas gotitas de zumo que quedaban en mi vaso.

-¡SORRY FOR PARTY ROOOOOOOCKING!-gritó mientras yo me descojonaba.

-Vale, lo he pillado. ¡VAAAAMOS A LA DISCO!

-¡Sí sí! Ven esta tarde a mi casa, tráete unos cuantos vestidos y nos preparamos juntas. ¿Vamos a la discoteca de siempre o la nueva?

-La nueva. Dicen que está muy bien, es más moderna que la otra. Y los precios son iguales.

-Entonces, nos vemos esta tarde enanita mía.-dijo besándome una mejilla.

April acabó de desayunar, cogió sus cosas y se fue de casa. Encendí la televisión ya que Bryan estaba desayunando.

* El famoso grupo británico One Direction ha pedido unas pequeñas vacaciones, ya que están cansados de tantos conciertos y giras. Sólo tienen una cosa pendiente en su agenda: Un concurso. Consiste en cantar una de las canciones del grupo y colgarla en YouTube con el siguiente nombre: “Concurso One Direction MTV”. Votaremos los vídeos, el que gane podrá pasar un día entero con los componentes de One Direction. Podréis cantar en pareja, en solitario o en grupo de cinco personas. Para más información entrar en nuestra página web. *

¿One Direction? Ese grupo me sonaba. Pero no sabía de qué. Apagué la televisión y me dirigí a la cocina.

-¿Bryan nos vamos ya o qué?-dije mientras cogía mi bolso.

-Vamos va.-contestó mientras salíamos de casa para dirigirnos al estudio con su moto.

El trayecto duró 20 minutos. Aparcamos el coche y entramos al estudio.

-Has cogido tu DNI ¿verdad?-le susurré mientras nos dirigíamos a la recepción.

-Pues claro enana, no soy tan despistado.-contestó y me guiñó un ojo.

Llegamos a recepción y dimos nuestros datos. Una señora nos acompañó a una pequeña sala para hablar tranquilamente del viaje con un hombre mayor, supuse que era el director.

-Hola chicos. ¿Qué edad tenéis?-preguntó el un poco extrañado.

-Yo tengo 18. Mi hermana cumplirá 16 dentro de dos semanas-contestó mi hermano.

El hombre sonrió e hizo un gesto para que nos sentáramos en unas butacas que habían enfrente de su escritorio. Nos sentamos y empezó a rebuscar en su cajón unos papeles. Los encontró y empezó a apuntar cosas. Al acabar habló:

-Bueno chicos, el viaje será dentro de tres días. Si queréis lo podemos atrasar...

-¡No no!-le interrumpió mi hermano.-para nosotros perfecto.

-De acuerdo. Yo me encargaba de elegir en qué lugar iríais de vacaciones, pero lo he estado pensando y creí que os haría más ilusión que lo eligierais vosotros.

-Oh, muchas gracias señor.-dije yo entusiasmada.-¿dónde quieres ir Bryan?

-Donde tú quieras.-contestó el sonriéndome.

-Bueno, en ese caso... ¿dónde vive papá ahora?-pregunté curiosa.

-Espera, lo llamo y le pregunto.-Bryan hizo un gesto para ver si podía salir de la pequeña sala y el hombre asintió con la cabeza.

Mientras yo hablaba con el hombre, muy majo por cierto, Bryan entró y se sentó en su respectiva butaca.

-Vive en Londres. Dice que nos podemos alojar en su casa.

-Entonces, ¿no queréis quedaros en el hotel reservado?-preguntó el hombre.

Los dos negamos con la cabeza. Estuvimos hablando sobre el viaje hasta que nos decidimos marchar.

-Encantado de conoceros chicos. Volved mañana por la tarde para recoger vuestros billetes. Adiós.-dijo el señor sonriendo.

-Igualmente señor. Nos vemos mañana.-contestamos los dos al unísono.

Salimos del estudio, no sin antes de despedirnos de la recepcionista, y nos subimos a la moto. El viaje hacia casa se me hizo corto. Ya eran las 15:00 y decidí preparar algo para comer, ya que mi madre había salido para arreglarse el pelo en la peluquería de mi calle con sus amigas, la madre de April y la de Emily.

Mi hermano y yo comimos las hamburguesas que había preparado yo y al acabar subimos cada uno en su respectivo cuarto.

Tenía que llamar a Emily. Emily era amiga mía y de April. Las tres éramos inseparables. Siempre nos lo contábamos todo y quedábamos casi todos los días. Me estiré en la cama, saqué mi iPhone del bolso y marqué su número de teléfono.

Contestó y le expliqué lo que pasó con Adam, y que me iba de viaje. Le pregunté si quería venir con April y conmigo a la nueva discoteca, y ésta aceptó. Le dije que fuera a casa de April sobre las 18:00 para prepararnos y colgué el teléfono.

Me levanté de la cama y me dirigí a mi armario. Saqué los vestidos sin estrenar y los puse en una bolsa. Mientras esperaba a que fuera la hora de salir de casa, encendí el portátil y me puse los cascos. Hablé con unas amigas por FaceBook unos 5 minutos y lo cerré. Me agobiaba que me hablara todo el mundo a la vez.